La respuesta es que la elección entre estos dos contendientes se puede hacer de manera arbitraria. Tarde o temprano se llegará a la solución óptima, sin importar cuál de las variables empatadas se haya escogido, y no existe un método conveniente para predecir cuál lleva ahí más rápidamente. En este ejemplo, ocurre que si se escoge x1 como variable entrante, el método símplex alcanza la solución óptima (2,6) en tres iteraciones y si se elige x2 llega en dos.
miércoles, 30 de octubre de 2013
Empate para la variable básica entrante
La respuesta es que la elección entre estos dos contendientes se puede hacer de manera arbitraria. Tarde o temprano se llegará a la solución óptima, sin importar cuál de las variables empatadas se haya escogido, y no existe un método conveniente para predecir cuál lleva ahí más rápidamente. En este ejemplo, ocurre que si se escoge x1 como variable entrante, el método símplex alcanza la solución óptima (2,6) en tres iteraciones y si se elige x2 llega en dos.
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