Cuando se trata de organizaciones lucrativas, un enfoque posible para no caer en el problema de suboptimizacion es utilizar la maximiazación de la ganancia a largo plazo, como un objetivo único. El adjetivo a largo plazo, indica que este objetivo proporciona la flexibilidad para considerar actividades que no se traducen de inmediato en ganancias (por ejemplo los proyectos de investigación y desarrollo) pero que tarde o temprano tendrán que hacerlo. A primera vista, este enfoque parece tener muchas ventajas. En particular, el objetivo es lo suficientemente especifico como para usarlo en forma adecuada, pero parece lo bastante amplio como para tomar en cuenta la meta básica de las organizaciones lucrativas. De hecho, algunas personas piensan que cualquier otro objetivo legitime se puede traducir a éste.
Sin embargo, estas es una sobresimplificación y debe tenerse mucho cuidado. Algunos estudios de corporaciones americanas han encontrado que es preferible la meta de ganancias satisfactorias combinada con otros objetivos, a la de maximizacion de la ganancia. (De hecho, la consideración inadecuada de las ganancias a largo plazo a veces se cita como el principal motivo de que la industria estadounidense esté perdiendo su competitividad al lado de otros países desarrollados.) En particular, los objetivos más frecuentes pueden ser conservar la estabilidad en las ganancias, aumentar (o conservar) la participación del mercado con que se cuenta, permitir la diversificación de productos, mantener precios estables, mejorar las condiciones de los trabajadores, mantener el control familiar sobre el negocio e incrementar el prestigio de la compañia. Estos objetivos probablemente sean compatibles con el de maximizar las ganancias a largo plazo, pero la relación puede ser tan oscura que tal vez sea mejor no incorporarlos.
Es más, existen algunas consideraciones incluyendo las responsabilidades sociales que son distintas del motivo de las ganancias. Dentro de un solo país, las cinco partes que quedan afectadas en una empresa de negocios son: 1) los dueños (accionistas), que desean obtener ganancias (dividendos, valuacion de las acciones) 2) los empleados, quienes desean un empleo seguro con un salario razonable; 3) los clientes, que quieren un producto confiable a un precio justo; 4) los vendedores, que piensan en la integridad y lo justo del precio de venta de los bienes que manejan, y 5) el gobierno, y por lo tanto, la nación que quiera el pago de impuestos justos y que se tome en cuenta el interés nacional.
Las cinco partes hacen contribuciones esenciales a la empresa, y ésta no debe servir a ninguna de estas partes para explotar a las otras. De la misma manera, las corporaciones internacionales adquieren obligaciones adicionales para llevar a cabo una práctica social responsable. Entonces, aunque obtener ganancias garantice ese objetivo primordial de la gerencia (y en última instancia, beneficie a las cinco partes), deberán también reconocerse esas responsabilidades sociales más extensas.